No sé bien.
Tengo un hombre creciéndome en el pecho,
vestido de silencio.
Entrecierro mis ojos y lo veo
andándome por dentro,
sembrándome su herencia allí en mi sangre.
Tengo un hombre desnudo entre mis labios,
me crece en la saliva
y lo encuentro formando mis vocablos.
No sé bien.
Tengo un hombre que me enciende por dentro,
enviado por Dios… tan mortal,
tan humano.
Parece venido de otro mundo.
Desviste mis pasiones
y se calza mis besos y mi ánimo.
No sé bien.
Tengo un hombre vestido tan sólo de silencio…
aquí, en este universo, desnudo entre mis manos.
Martha Jacqueline Iglesias Herrera
Del POEMARIO: "EMBRUJO DE VISIÓN"
Poema ilustrado con la pintura de Lidia Wylangowska
No hay comentarios:
Publicar un comentario