Sé
que estás ahí.
Buscándome
entre las sombras de otra vida.
Ningún
espejo es luz cuando te reto
a
verme milenaria entre la bruma.
¿Acaso
vienes como el soplo de un ángel
que
conjura a favor de todo paraíso?
He
guardado tu rostro de destierro
entre
mis ganas de ser más que memoria;
hacedora
de lluvia en estos tiempos
en
que tu sueño al rojo es una hoguera
donde
arden los cielos de otros mundos.
¿Polvo
y ceniza parece la condena
en
los presagios de la absolución?
Te
dejo la huella entre dos nombres
de
algún después que huye en la mirada,
reliquia
a merced de los oráculos
que
nacen anterior a la nostalgia.
¿La
flor del que no está es un rescoldo
que
habla del silencio de un presagio?
Vas
a poder llegar, me digo.
Yo
sé que estás ahí.
Martha Jacqueline
Del Poemario: "Si no fuera de ti".